El segundo día partimos de Chipiona con la intención de recoger toda la información posible sobre las artes de pesca utilizadas en el entorno de
Una vez que el buque de Inspección arribó al puerto de Chipiona a la hora establecida, y mientras nosotros estábamos a bordo de uno de los cerqueros entrevistando a su patrón, se reunieron en torno a nosotros todos los barcos de cerco que parecían faenar por los alrededores. Aquel patrón, sin mostrar un solo atisbo de preocupación por la presencia de la cámara con la que filmamos la entrevista, nos relató, con total sinceridad, cómo intentaban “engañar” a los agentes de Inspección Pesquera esperando a que se retiraran para poder faenar en aguas prohibidas, pues las zonas en las que sí les permitían pescar apenas conseguían capturas para rentabilizar su trabajo.
Éstos documentos muestran lo que sin duda es una deficiencia en lo que a la gestión pesquera de una zona tan sensible cómo es la desembocadura del Guadalquivir se refiere. Además, el sector pesquero es consciente de la situación de la pesca y quiere soluciones, sin embargo reclama que sus peticiones no son escuchadas en las reuniones con el gobierno regional.
Una de las principales fuentes de nutrientes en el Golfo de Cádiz es el río Guadalquivir, que aporta nitrógeno, fósforo y demás elementos de los que se alimenta el fitoplancton, iniciándose así una cadena alimenticia que llega hasta altos niveles tróficos (atunes, peces espada, tiburones, delfines, etc.). Por este motivo,
David Costalago Meruelo.
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